Los saltos simples
Ya estoy aquí, escribiendo otra vez sobre saltos.
Hemos comentado en artículos anteriores, que los saltos simples son 8:
Metz, Salto Inglés, Salchow, Riper, Turen, Flip, Lutz y Axel.
Explicamos ahora por tanto, desde este artículo, los dos saltos que nos quedan pendientes.
Hoy escribimos sobre el Lutz y el Axel.
Hacer el Axel es el preludio a los dobles y a las competiciones de alto nivel. Si has llegado hasta él y lo ejecutas con destreza, enhorabuena. El camino hasta aquí seguro que ha implicado dedicar mucho tiempo, dinero y esfuerzo a este hermoso deporte. Continuar en él, te puede llevar a momentos inolvidables en pista, tanto buenos como malos pero en todos esos momentos aprenderás a controlar cuerpo y mente.
LUTZ
Es un salto muy parecido al Flip en ejecución. Pican freno con la misma pierna.
Se ejecuta patinando de espaldas hacia el lado izquierdo, el resto de saltos se patinan hacia la derecha.
Presionando sobre el exterior del patín izquierdo. Se ejecuta un giro completo en el aire.
Por último, se marca bien la salida final.
AXEL
El Axel es uno de los saltos más odiados y más queridos, porque es complicado.
Una vez que se sabe hacer es muy satisfactorio realizarlo. Suele ser la meta final al aprendizaje en cuanto a saltos simples se refiere. Psicológicamente es muy sano marcarse pequeñas metas a conseguir, en este y en cualquier deporte. La mente y el cuerpo necesitan saber que progresas para motivarse a conseguir anhelos nuevos.
Se hace una entrada similar a la del salto Inglés y es el único salto que se salta de frente, por lo que es muy reconocible, además es de una vuelta y media.
Axel viene de un nombre propio, como muchos habrán deducido. Axel Paulsen fue su creador.
Patinar no es trabajo fácil, por ello el perfeccionamiento de todos los saltos será prácticamente diario. Nos damos cuenta de que aunque exista la sensación de logro, está presente también la sensación de pulir.
Brillar en la pista durante las competiciones es muy gratificante, pero lo es también el momento clave donde uno de los saltos sale por primera vez.
Muchos patinadores bromean con la anécdota de que fastidia muchísimo llevar días intentando ejecutar un salto correctamente y que la primera vez que sale, nadie esta mirando.
La alegría y la sensación de subidón es tal, cuando eso pasa por primera vez, que estas deseoso de gritar: Me ha salidoooooooo!!! Aunque no siempre hay alguien al lado, la experiencia es genial.
Con ganas de que todos tengáis oportunidad de vivir esos momentos, ya sea en primera persona o junto a alguien, me despido
Salud!!!