Entrenamientos cooperativos y colaborativos.
Es una buena opción de conocerse y trabajar unos con otros, la idea de cooperación entre clubes.
Este fin de semana las chicas PuroPatín han sido de los afortunados en poder vivir esta experiencia.
El club donde entrenan diariamente y Club Sant Vicenç de Montalt, han realizado entrenamientos intensivos y de tecnificación juntos.
Los participantes catalanes han pasado el fin de semana en casa de los mallorquines. Han podido estar todo el fin de semana juntos y compartir su pasión. Entender la idea de trabajo y sacrificio que tiene cada uno de ellos.
Ver el mundo del patinaje artístico sobre ruedas a través de los ojos de otros, nos enseña a entender mejor las cosas y a conocer otras perspectivas.
La cooperación entre entrenadores.
Es también un ejemplo de sabiduría y generosidad.
Entrenadores y preparadores físicos, se aúnan para ofrecer a los jóvenes deportistas mejoras significativas para su modo de vivir el patinaje artístico sobre ruedas.
En este tipo de campus, los deportistas indagan, no puramente en la técnica del patinaje artístico sobre ruedas. También en valores como la solidaridad, el esfuerzo, honestidad, responsabilidad y la ayuda mutua.
Este fin de semana han participado en los entrenamientos cerca de 50 patinadores de entre 7 y 15 años. Aunque viven momentos de cansancio y sacrificio, todos repetirían experiencia. Esto indica no sólo que son trabajadores, sino que comparten verdadera pasión por la mejora en su disciplina.
Buenas experiencias.
En este deporte es bueno tener a bien todos los valores que oferta la convivencia, ya que al final, nos acompañan cuando estamos solos en pista, afrontando un ejercicio.
Ayuda a preparar nuestras mentes para vivir mejor la competición y la concentración.
En varias ocasiones he comentado que la cabeza patina, está claro que también lo hace el alma. La pasión por lo que uno hace es primordial.
Los trabajos en grupo, en deportes tan individuales, hace que la idea de competir también conviva con la de compartir.
Los participantes ya están deseando volver a participar en algo así, que se dediquen horas al baile, fisioterapia, técnica del patinaje y como no, formas de conocer a gente que practica el mismo deporte.
Un buen cocktail de sensaciones, vivencias y sobre todo patinaje artístico sobre ruedas.
Salud!!!
La juventud, el periodo de lo posible.