Describir términos como este no es nada fácil ya que tiene que ver con la percepción de cada uno.
De hecho he buscado confianza en la RAE y la Wikipedia. No me termina de convencer la descripción que dan. Soy así, algo inconformista por naturaleza, qué le vamos a hacer?
La confianza a mi parecer, puede entenderse como la creencia en que algo saldrá como deseas. O que alguien actuará de manera beneficiosa para ti. No deja de ser una hipótesis de lo que sucederá en el futuro, ligado a la necesidad de sentirnos seguros.
Si mi definición de confianza no os convence, o la sentís incompleta, no dudéis en escribirnos. Vuestra opinión nos importa.
La confianza tiene varias connotaciones.
Me encanta la idea de círculo de confianza, utilizada en el mundo empresarial.
Cuantas veces oigo en mi cabeza la voz de mi madre diciendo aquello de “la confianza da asco” y me sonrío. Parece cierto que casi siempre pedimos favores a nuestras personas de confianza, así que puedes apoyarte en esas mismas personas, cuando lo necesites en referencia a patinaje.
Solemos exigir más a la gente que tenemos confianza, igualándolo casi a nuestras autoexigencias.
Es importante confiar en patinaje.
Hemos hablado en anteriores artículos en PuroPatín de la confianza en uno mismo y en lo que nos beneficia.
Si pensamos que no somos capaces de realizar determinada tarea o habilidad a la perfección, probablemente no seremos capaces de hacerlo. Necesitamos visualizarnos y vivir en positivo.
La confianza es una variable muy importante dentro del mundo del deporte.
¿Cómo se puede trabajar la confianza?
Evita a toda costa el autoboicot. No tengas miedo al éxito.
Pensar en positivo (uffff creo que utilizo demasiado esa frase, pero es que me parece esencial), marcar objetivos realistas, prepararse y entrenar a conciencia, rodearse de gente positiva, evitar darle importancia a comentarios que nos comparen con otros o nos pudieran hacer sentir inferiores. Todo esto te ayudará a trabajar con confianza.
¿Confían o no en nosotros?
Que no te importe demasiado lo que piensen los demás, será un buen objetivo.
Lo que diga el técnico, compañeros o familiares no es lo verdaderamente importante, si no cómo lo “traduzca” tu cerebro y cómo te haga sentir.
Trabajar tu manera de entender el entorno de manera que te haga el día a día enriquecedor.
Ejemplo:
Te dicen: Has hecho un desastre de disco, te van a poner mala nota.
Podemos tomarnos esa misma frase de muchas maneras y muy diferentes.
- No creen en mi, mejor dejo el patinaje y me paso a la petanca.
- En muchas ocasiones me sale bien, así que me centraré en intentar evitar lo que hice ahora.
- Ahora es ahora, adivinar el futuro nunca lo creí posible.
- …..
Elige lo que te haga sentir mejor y no, lo que creas que hará feliz a los demás. No te esfuerces por complicarte la vida.
Eres el deportista, la pieza clave, el que lucha, trabaja, se esfuerza y sueña, entonces céntrate en disfrutar. No hablo de egoísmo ni narcisismo, si no de bienestar.
Una vez entendido que tu estado de ánimo no depende de lo que dice alguien, sino de cómo lo entiendas en tu interior, es más probable que puedas hacer un esfuerzo por lograr que no te dañe lo que puedan opinar los demás.
Es genial escuchar la opinión de otros, debatir, discutir, matizar… pero es importante centrarse en tener opiniones propias y confiar en ti.
¿Cómo se siente un patinador?
Lo bonito sería que siempre motivado.
Cada deportista es un mundo y saber cómo se sienten además, varía dependiendo de la edad o del momento que están viviendo.
Tan inestables son las sensaciones, que es lógico que en muchas ocasiones necesitemos darle vueltas al tema en nuestras cabecitas.
Los patinadores muchas veces sienten la necesidad de que su entrenador los apoye, confíe en ellos y se lo haga saber. No siempre sucede y hay que seguir avanzando.
La mayoría tienen claro que los amigos y familiares estarán a su lado pase lo que pase y por mucho que los animen, sienten necesidad de aprobación de fuera de su círculo familiar. Todo influye a la hora de patinar y hay que intentar dominar las emociones.
Las relaciones interpersonales son caprichosas, así que lo mejor es no estar esperando siempre el apoyo incondicional de otro y centrarse en que puedes hacerlo. Trabajar por tener autoestima alta, que te ayude en momentos así.
Hay que buscar las herramientas para sentirse bien. A veces necesitamos irremediablemente que nos ayuden porque no vemos el camino.
Puede ser beneficioso tener un coach o psicólogo deportivo en momentos de mayor estrés, que te ayude a canalizar lo que sientes. De tal manera que puedas trabajar más cómodo y que todo ello, te ayude a vivir el patinaje artístico sobre ruedas, sobretodo de competición, sin pasar malos ratos.
Confiamos en que aprender a quereros y entendernos, nos ayude a todos.
Salud!!!