Existen muchas cosas por las que los niños y adolescentes tienen que realizar esfuerzo. No sólo se trata de los estudios, sino que es necesario para conseguir logros. Está presente en muchos ámbitos de su vida, como pueden ser el deportivo o el artístico. Y como no, sucede en el patinaje artístico sobre ruedas.
Querer es poder.
La capacidad de esfuerzo físico y el rendimiento, son cosas diferentes.
El esfuerzo utiliza nuestras capacidades físicas y psíquicas del rendimiento para lograr un ejercicio determinado.
El rendimiento depende de la capacidad del deportista, la disposición, la especificación e incluso del entorno.
El valor del esfuerzo.
Todos sabemos que cualquier logro requiere, al menos, un mínimo.
También es bueno saber que, entre pasar de todo y “la letra, con sangre entra”, hay muchos matices.
Hay que fomentar en los jóvenes que valdrá la pena.
Veo interesante crear un entorno con un clima ordenado, afectuoso, pero exigente.
Algunos piensan que el esfuerzo es ya un valor en crisis. Sólo es necesario mirar hacia el punto adecuado, para darse cuenta que a nuestro alrededor hay mucha gente con ese valor como prioritario y que se esfuerzan muchísimo.
¿Vale la pena esforzarse en patinaje?
Rotundamente sí. Es cierto que a aquellos que la fortuna los haya dotado de espléndida genética, necesitaran menor esfuerzo para obtener buenos resultados, pero en general a mayor esfuerzo, mejores resultados en el patinaje artístico sobre ruedas.
Los esfuerzos en trabajar y hacer buenos y completos entrenamientos, darán como respuesta un patinaje de calidad.
Logros a través del esfuerzo y otros factores, como la disciplina, el compromiso y el conocimiento de lo que se está haciendo, son claves para ver resultados que satisfagan.
Recordad que siempre insistimos en que la cabeza también patina. Así que hay que trabajar no solo físico, sino abarcar todo lo que pueda ayudarnos a optimizar nuestros ejercicios.
El deporte es un ejemplo magnífico de actividad, en la que es necesario no sólo para ganar, que no siempre es el fin principal, sino para ir superándose día a día.
Buenos y admirados patinadores nos han enseñado el valor de esforzarse y la superación personal, venciendo sus miedos y sus dificultades.
Hagamos un esfuerzo por ser felices.
Salud!!!